ISO 11040 es una norma de prueba que cubre el diseño y las características funcionales de las jeringas precargadas. Utilizada principalmente en la industria farmacéutica, la norma ISO 11040 es crucial para garantizar que las jeringas funcionen correctamente en entornos clínicos. La evaluación ISO 11040 se lleva a cabo durante todo el proceso de fabricación para minimizar cualquier posibilidad de que un equipo defectuoso salga de fábrica, ya que la falla de cualquier subcomponente puede tener consecuencias significativas para los médicos o los pacientes: un sellado inadecuado puede provocar la oxidación del medicamento y afectar la vida útil del producto, mientras que el daño estructural al cilindro de la jeringa puede causar un mal funcionamiento del equipo.